Un informe médico elaborado por expertos de la Escuela de Medicina de la Universidad de Emory (Estados Unidos), concluye que los niños no deben tomar más de seis cucharaditas de azúcar al día, es decir, el equivalente a una barrita de chocolate o al consumo de menos de una lata de refresco, como por ejemplo una Coca Cola, ya que esta bebida contiene algo menos de 10 cucharaditas de azúcar. El informe advierte que una Coca Cola y un snack dulce constituyen sólo una pequeña fracción de los azúcares que los niños consumen en su dieta diaria.
Lo cierto es que la información que brindan los expertos no es una novedad, recordemos que la OMS (Organización Mundial de la Salud) comenta que el consumo de azúcar no debe superar el 5% del total de calorías que se ingieren al día, es decir, unos 25 gramos de azúcar que equivalen a seis cucharaditas de café, con ello se apreciarán grandes beneficios para la salud. Pero esta regla se determina para los adultos, que tienen un índice de masa corporal normal, por lo que se puede deducir que la cantidad de azúcar para un niño debería ser menor.
Según el informe, superar aunque sea un poco esa cantidad de azúcar establecida por día, supone un peligro para la salud de los niños. En el informe también se advierte que los niños menores de dos años, no deben tomar ningún producto que contenga azúcares añadidos, algo que no cumplen muchos padres al introducir determinados alimentos en la dieta infantil. Según el Instituto Nacional de Salud del país, los niños con edades comprendidas entre los 4 y 8 años, no deberían tomar más de tres cucharaditas de azúcar al día (unos 12 gramos), en el caso de los niños a partir de 9 años, no se deberían superar las ocho cucharaditas diarias. Esta última recomendación parece errónea ya que supera la recomendación de la OMS.
Los investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de Emory lanzan la siguiente recomendación para niños de 2 a 18 años de edad, la cantidad de azúcar debe ser la misma, es decir, no superar las seis cucharaditas de azúcar, un objetivo saludable que en principio se puede alcanzar. En este caso no estamos de acuerdo ya que muchos alimentos contienen azúcares añadidos y la mayoría de los consumidores no los identifican en las etiquetas alimentarias, al respecto, os recomendamos leer este post.
Los expertos comentan que los niños que consumen alimentos y bebidas cargados de azúcar tienden a comer menos alimentos saludables, como pueden ser las frutas y verduras, los cereales u otros productos bajos en grasa que son beneficiosos para la salud. Los expertos consideran que ha existido poca claridad y falta de consenso a la hora de determinar cuál es la cantidad de azúcar que se considera segura en la alimentación infantil. Como ya hemos explicado, la recomendación de la OMS hace alusión a los adultos, pero no realiza recomendaciones concretas para los más pequeños.
Lamentablemente, la suma total de azúcar que se añade a muchos alimentos que consumen a diario los niños, supera con creces la ingesta recomendada de 25 gramos como máximo, un niño estadounidense consume aproximadamente el triple de azúcar de la cantidad recomendada debido a lo que se añade en los alimentos. Es necesario que se tomen diariamente las calorías que necesita el organismo, ni más, ni menos, con ello se logrará un peso adecuado y una buena salud, por ello hay que evitar aquellos alimentos y bebidas cargados de azucares añadidos, los alimentos que sólo aportan calorías vacías o los que tienen una elevada carga calórica.
Los expertos explican que un niño debería tomar como mucho una lata de refresco a la semana, pero lamentablemente la mayoría de los niños toman mucha más cantidad. Se podría recomendar la ingesta de refrescos con edulcorantes no calóricos, pero debido a la falta de investigación sobre los efectos que pueden provocar en la salud, no pueden realizar dicha recomendación. Podéis consultar el informe a través de este artículo publicado en la revista científica American Heart Association Journal Circulation.